La Incontinencia Urinaria tiene solución
En Cellumed Clinic, aportamos un conjunto de técnicas que aportan el mejor resultado para cada paciente.
¿Padece Incontinencia Urinaria?
No desespere, en nuestra clínica ofrecemos tratamiento para la incontinencia con excelentes resultados.
La incontinencia urinaria es una condición que afecta a millones de personas en todo el mundo, generando no solo incomodidad física, sino también un impacto emocional y social significativo. Existen múltiples factores que pueden contribuir al desarrollo de esta afección, la principal causa es el debilitamiento del suelo pélvico, debido a diferentes condiciones médicas, cambios físicos y hábitos de vida. Generalmente se considera un síntoma de envejecimiento en la mujer, pero no es así, la incontinencia puede afectar desde muy jóvenes tanto a mujeres como a varones, y puede tratarse con éxito.
En la clínica le ofreceremos una consulta gratuita para determinar mejor qué técnica, en su caso, puede ser la más apropiada. Dentro de nuestras terapias. Utilizamos la fisioterapia de fortalecimiento del suelo pélvico, tecnología con generador de pulsos electromagnéticos, una radiofrecuencia innovadora con dos sistemas de ondas, entre otros.
Causas de la Incontinencia Urinaria
- Diabetes
La diabetes es una de las condiciones médicas más comunes asociadas con la incontinencia urinaria. Esta enfermedad puede afectar los nervios que controlan la vejiga, resultando en un almacenamiento y vaciado ineficaces de la orina. Además, la diabetes también puede causar infecciones del tracto urinario, que pueden agravar los síntomas.
- Postparto
Muchas mujeres experimentan incontinencia urinaria después de dar a luz. Los cambios físicos durante el embarazo y el parto pueden debilitar los músculos del suelo pélvico, que son esenciales para el control de la vejiga. Esta debilidad puede llevar a episodios de incontinencia, especialmente durante actividades que generan presión, como toser o reír.
- Envejecimiento
Con la edad, los músculos del suelo pélvico pueden debilitarse y la capacidad de la vejiga puede disminuir. Esto es especialmente común en mujeres después de la menopausia, cuando los cambios hormonales afectan la elasticidad y la función de los tejidos.
- Obesidad
El exceso de peso puede ejercer presión sobre la vejiga y los músculos del suelo pélvico, aumentando el riesgo de incontinencia urinaria. La pérdida de peso puede ser un factor clave en la mejora de los síntomas para aquellos que tienen sobrepeso.
- Enfermedades neurológicas
Condiciones como la esclerosis múltiple, el Parkinson y los accidentes cerebrovasculares pueden afectar los nervios que controlan la vejiga, provocando problemas de incontinencia. La pérdida de la función neurológica puede complicar el vaciado adecuado de la vejiga.
- Intervenciones quirúrgicas
Algunos procedimientos quirúrgicos, especialmente los que involucran el sistema reproductivo o urinario, pueden afectar la función de la vejiga y llevar a la incontinencia urinaria. Esto puede ser temporal o permanente, dependiendo de la cirugía realizada.
Tratamientos para la Incontinencia Urinaria
- Diatermia
Este tratamiento innovador utiliza calor para estimular los músculos del suelo pélvico y mejorar su función. La diatermia es un procedimiento no invasivo que ha mostrado resultados prometedores en la reducción de los síntomas de incontinencia urinaria. Al mejorar el tono muscular, puede ayudar a restaurar el control sobre la vejiga.
- Ejercicios de Kegel
Estos ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico son fundamentales para las mujeres que han dado a luz o para aquellos que sufren de debilidad en esta área. Realizar estos ejercicios regularmente puede ayudar a mejorar el control de la vejiga.
- Entrenamiento de la vejiga
Este enfoque implica programar visitas al baño y practicar técnicas de retención para ayudar a la vejiga a mantener la orina por más tiempo. Es especialmente útil en casos de incontinencia de urgencia.
- Medicamentos
Existen diversos medicamentos que pueden ayudar a controlar la incontinencia urinaria. Los anticolinérgicos son comunes y pueden reducir las contracciones de la vejiga. Sin embargo, estos tratamientos pueden tener efectos secundarios, por lo que es importante discutir las opciones con un médico.
- Estimulación nerviosa
La terapia de estimulación nerviosa sacra es otra opción para aquellos que no responden a tratamientos más convencionales. Este procedimiento implica la colocación de un pequeño dispositivo que envía impulsos eléctricos a los nervios responsables del control de la vejiga.
- Intervenciones quirúrgicas
Para los casos más severos, puede ser necesario recurrir a la cirugía. Existen diversas técnicas, como la colocación de mallas o la cirugía de suspensión de la vejiga, que pueden ofrecer soluciones duraderas.
- Terapias complementarias
La fisioterapia y el asesoramiento psicológico también pueden ser de gran ayuda. La fisioterapia especializada en suelo pélvico puede ofrecer técnicas adicionales para fortalecer los músculos, mientras que el apoyo psicológico puede ayudar a abordar las preocupaciones emocionales relacionadas con la incontinencia.
Es fundamental que las personas que experimentan incontinencia urinaria busquen ayuda médica. Un diagnóstico preciso y un enfoque personalizado son esenciales para encontrar el tratamiento más adecuado. Con las opciones disponibles, es posible recuperar el control y mejorar significativamente la calidad de vida.